SEXTO DOMINGO DE PASCUA
No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido
Lectura del santo evangelio según san Juan 15,9-17
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
– Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor.
Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud.
Este es mi mandamiento: que os améis unos a otros como yo os he amado.
Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos.
Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a vosotros os llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer.
No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto dure.
De modo que lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo dé.
Esto os mando: que os améis unos a otros.
SALMOA 97, 1. 2-3ab. 3cd-4. 5-6
R/. Agertu dau Jaunak aurrean Beragandiko garaipena.
Kanta Jaunari kantu barria,
egintza harrigarriak egin ditu-eta:
garaipena emon deutso bere eskumeak,
bere beso santuak. R/.
Bere garaipena ezagutuazo dau Jaunak,
bere salbamen-egintza agertu nazinoen aurrean.
Ez dau ahaztu bere maitasuna,
Israel herriari deutson leialtasuna. R/.
Munduko bazter guztiek ikusi dabe
gure Jainkoaren garaipena.
Egin irrintzi Jaunari, lur osoa,
egin poz-oihu eta kantu, jo soinua. R/.
Ospatu Jauna zitaraz,
zitaraz eta kantu-hotsez,
turutaz eta adar-hotsez;
egin irrintzi errege dan Jaunari. R/.
REFLEXIÓN
Este Domingo VI de Pascua celebramos -con toda la Iglesia- la Pascua del Enfermo. Es, por tanto, un día apropiado para celebrar en la Parroquia y dentro de la eucaristía el Sacramento de la Unción de los Enfermos con todas las personas que atraviesan situaciones de enfermedad o de vulnerabilidad, y así lo desean.
Sin embargo, esta propuesta de celebrar el Sacramento de la Unción de los Enfermos de forma comunitaria y con un carácter festivo no termina de prender entre los fieles. ¿Qué pasa?
En la mentalidad popular persiste la idea de que este sacramento es para el último momento… Cuando ya no se puede hacer nada. Es más, hay familiares que piensan que si se avisa al sacerdote, la persona enferma se va a “intranquilizar”; o lo que es peor, se va agravar su estado. Así que esperan a que se encuentre sedada o a punto de morir para llamar al sacerdote.
Ante esto cabe decir cuatro cosas:
- Hoy seamos muy sensibles con unos derechos humanos, y al mismo tiempo no lo seamos con otros. Entre los derechos que asisten al enfermo está el saber la verdad sobre su enfermedad, y el recibir la asistencia humana y espiritual que necesita.
- Las personas enfermas, la mayoría de las veces, son mucho más consciente de su situación de que lo creen sus familiares.
- La farmacología ha logrado mitigar en un grado muy alto el dolor físico; pero la persona enferma -si no tienen con quien hablar sobre sus miedos y sentimientos, y con quien poder hacer balance de su vida- puede sufrir mucho emocional y moralmente.
- Es muy triste que una persona que ha vivido a la sombra de la Iglesia, se vea privada de ayuda humana y espiritual en una situación tan delicada como es esta.
Por tanto, el Sacramento de la Unción no es:
- un sacramento para el último momento de la vida (salvo excepciones: accidente, ictus,…).
- un pre-anuncio de la muerte,
El Sacramento de la Unción de los Enfermos es:
- Una oportunidad para abrirse al amor misericordioso de Dios
- Una acción de la Iglesia que –por medio del sacerdote- se acerca a la persona ungiéndole con el aceite de la salvación
- Un sacramento para vivir cristianamente la enfermedad, recibiendo el perdón de Dios y la salvación.
Jesucristo -por medio del Sacramento de la Unción- comunica su fuerza, su amor, su vida a quienes:
- Han empezado a sufrir una enfermedad degenerativa, crónica o grave
- Ven como sus fuerzas -a causa de la edad- se van debilitando,
- Se van a someter a una intervención quirúrgica seria,…
Él, a estas personas, les dice: “No estás sola. Yo estoy contigo. Tú eres uno de mis preferidos. Estoy en tu interior, y en cada persona que te quiere y te ayudan”.
Por Mikel Martínez
Itun barria maitasunean
Fededun judu eta kristauarentzat, Itun Zaharra Urteera liburuko 20. kapituluan laburbiltzen da: “Nire herri izango zarie eta Ni zuen Jainko izango naz”. Itun Zahar hau bete beharreko klausulez beteta dago. Kristok oparitutako Itun Barria ez dau ezerk baldintzatzen, baldintza bakoa da: «Maitatu eizue alkar, nik maitatu zaituedan lez».
Jainkoaren maitasuna Jesusengan agertuta
Sarritan kristauok maitasunaren ‘atarian’ geratzen gara, «baldintzak jarten deutsaguzalako» gure maitasunari eta, maitasun hori besteei emoteko askotariko baldintzak betetea eskatzen dogu, beti be geure premina edo gurariak asetzeari lotutako baldintzak. Ez Jainko Aitak, ez Kristo Jesus bere Semeak, ez dabe gure maitasunaren preminarik; baldintza barik maitatzen gaitue hiru morrontzatik askatzeko: legearena, pekatuarena eta heriotzarena. Horrexegaitik, Itun Barrira bihurtzeko geure bihotza aldatu egin behar dogu Jainkoak eta Jesukristo bere Semeak emoten deuskuen maitasuna geure eginez eta zabalduz.
En Bizkeliza.org
OTOITZA
Llamada a la amistad
Señor, Tú me llamas por mi nombre
tu evangelio no es un ideal por el que luchar
sino una amistad que Tú deseas.
Me nombras y me pides que te siga.
Siento cómo la ilusión y los miedos me invaden
estoy tentado de mirar a otro lado
pero sé que todo sería vacío
Miro mis redes, mis ocupaciones, mis trabajos.
Pero al pensar en seguirte y estar contigo
todo se me cae de las manos.
Deseo dejarlo todo y caminar contigo
no sé dónde iremos o con quién nos encontraremos
pero estaré contigo y eso me basta.
Javi Montes, SJ
